Ya antes de ser mamá, fui maratonista y hacía ejercicio 5 o bien 6 veces a la semana. No obstante, y pese a que pesaba diez libras menos que ahora, no estaba conforme con ciertas unas partes de mi cuerpo, sobre todo el abdomen.
La llegada de mis hijos agudizó la situación por el hecho de que esas libras que aumenté semejan haber llegado por siempre, y están justo donde menos me hacen feliz: en el estómago y en torno a la cintura.
Cuando hablo de esto con mis amigas y conocidas la sugerencia siempre y en todo momento es exactamente la misma, que me haga la lipectomía, una cirugía consistente en eliminar el exceso de grasa y de piel y que promete dejarte el abdomen como de quinceañera. No obstante, una operación de este modo tiene múltiples peligros pues implica entrar a un quirófano, que te administren anestesia general, pérdida de sangre y una restauración lenta, entre otras muchas cosas.
Creí que si volvía a mi rutina de ejercicio podría quitar “naturalmente” esa grasita que me tiene tan molesta, mas no ha sido de este modo. Y de ahí que que desde hace ya un tiempo empecé a buscar opciones alternativas para deshacerme de esas libras indeseadas. Fue entonces en el momento en que una de mis hermanas me charló de un tratamiento novedoso consistente en “congelar” la grasa.
Al comienzo me pareció un tanto irracionales que el cuerpo se pudiese “arreglar” de esa forma, mas empecé a pesquisar y esto fue lo que hallé después de acudir a una charla con representantes de CoolSculpting, que estuvieron en Los Angeles para explicar de qué manera marcha esta tecnología.
Lo más esencial que hay que comprender es que este procedimiento emplea el frío intenso en forma controlada para congelar las células que se quieren suprimir.

“El tejido graso es más susceptible a daño por el frío” afirmó la dermatóloga Vivian Bucay, quien fue la doctora convidada a dar la conversación y que ofrece este tratamiento en Clinica Lemel. “Congela las células de grasa sin herir la piel que está encima”.
Aparte de explicar de qué manera marcha, estas fueron ciertas inquietudes que respondió la especialista.
¿Las células congeladas pueden regresar a llenarse de grasa?
No. Las células congeladas después del tratamiento mueren y ya no retornan.
¿Cuánto tiempo dura el tratamiento?
Cada una de las sesiones es de treinta y cinco minutos, y la técnica se aplica a la una parte del cuerpo que se quiera corregir.
¿Todas y cada una de las personas son aspirantes a este procedimiento?
No. Un porcentaje mínimo no lo es por razones médicas y tampoco lo son las personas que tienen sobrepeso. Este procedimiento, como su nombre lo afirma, es para “esculpir”, para refinar parte de cuerpo que no se puede corregir a través de el ejercicio.
¿Se aconseja para bajar de peso?
No. Esta técnica no es para bajar de peso. Es para personas en forma y que desean corregir parte de su cuerpo.
¿La piel donde se aplica el tratamiento va a quedar fláccida?
No. Se ha comprobado que una vez eliminada la grasa, la piel se contrae y se queja al cuerpo.
¿Cuáles son las partes más habituales donde los pacientes se hacen el tratamiento?
Los brazos, la entrepierna, las caderas, abajo de la cintura, la papada, la parte baja del glúteo y los “gorditos” que se forman en la espalda, arriba del sostén.
¿En cuánto tiempo se pueden ver los resultados?
En 3 semanas.
¿El tratamiento daña la piel?
No por el hecho de que no se trata de láser, radiofrecuencias o bien luz pulsada. No daña la zona tratada.
¿Deja cicatrices?
No por el hecho de que no es un tratamiento invasivo. El paciente no ingresa al quirófano, no entra una cánula a su cuerpo, como en el caso de la lipoescultura, y tampoco hay incisiones.
¿Es más asequible que una cirugía plástica?
No, si bien depende del número de sesiones y de las partes que se quieran corregir. Si bien la doctora afirma que el costo no ha de ser la motivación, sino más bien la posibilidad de prosperar las unas partes del cuerpo sin correr peligros y permanentemente.
¿El paciente debe ser internado?
No. El paciente entra y sale exactamente el mismo día de la clínica.
¿Este es un procedimiento nuevo?
No. Se emplea desde hace prácticamente una década.
¿Está aprobado por la Administración de Fármacos y Alimentos?
En este género de procedimientos, la Administración no aprueba, sino da el visto bueno. Sí, CoolSculpting tiene el visto bueno de esta dependencia.
¿Duele el tratamiento?
No. No duele si bien después del tratamiento queda una marca roja que desaparece después de unos días.
¿De qué manera se suprime la grasa “congelada”?
Se suprime de igual forma que el cuerpo suprime la grasa de el alimento, a través del hígado y la orina. La grasa no se amontona en otra parte.
¿Hay limitación para la edad?
No, cualquier persona puede someterse al tratamiento sin importar lo más mínimo la edad.
¿Quita la celulitis?
No. No fue desarrollado para suprimir la celulitis, si bien al eliminar la grasa con CoolSculpting se reduce y se reduce el aspecto que causa la celulitis.
Este vídeo explica con una paciente real de qué manera se administra el tratamiento.